Las freidoras de aire se han convertido en uno de los electrodomésticos más populares de los últimos años, pero muchos consumidores se preguntan si en 2025 todavía vale la pena invertir en una. La respuesta corta es sí, sigue siendo una compra inteligente, pero solo si se entiende bien lo que ofrecen y se elige el modelo adecuado. En este artículo te explicamos por qué sigue siendo una buena opción, qué ha cambiado con los nuevos modelos y cuándo puede no ser la mejor elección.

Por qué las freidoras de aire siguen siendo relevantes en 2025

En 2025, las freidoras de aire han evolucionado considerablemente. Los modelos actuales ya no solo “fríen sin aceite”, sino que integran funciones de horno, parrilla, deshidratador y hasta cocción al vapor. Esta versatilidad las convierte en un electrodoméstico multifuncional que ahorra espacio y energía.

Además, los avances tecnológicos han permitido una cocción más rápida y uniforme, con sensores inteligentes que ajustan la temperatura automáticamente según el tipo de alimento. Esto representa una mejora frente a los modelos de hace algunos años, que a veces dejaban partes crudas o secas.

Otro punto a destacar es el ahorro energético. En comparación con un horno convencional, una freidora de aire puede reducir el consumo eléctrico hasta en un 50%, lo que en el contexto actual de aumento en las tarifas de energía resulta un beneficio clave.

Ventajas de comprar una freidora de aire en 2025

1. Cocción más saludable y eficiente

El beneficio más conocido es que reduce el uso de aceite hasta en un 90%. Esto no solo disminuye las calorías, sino también el consumo de grasas saturadas. En 2025, los fabricantes han mejorado los sistemas de circulación de aire, logrando una textura crujiente más parecida a la fritura tradicional, pero sin exceso de grasa.

2. Ahorro de tiempo y energía

Los nuevos modelos incluyen modos automáticos para preparar papas fritas, pollo, pescado, postres o vegetales sin tener que ajustar manualmente cada parámetro. También precalientan más rápido que un horno convencional, lo que reduce el tiempo de cocción total.

3. Menor gasto y mantenimiento

Una freidora de aire de buena calidad puede durar entre 3 y 7 años con el cuidado adecuado. Además, sus piezas desmontables y aptas para lavavajillas simplifican la limpieza. En 2025, muchas marcas han incorporado recubrimientos antiadherentes más resistentes y libres de PFOA, lo que las hace más seguras y duraderas.

4. Menor impacto ambiental

El consumo energético más bajo y la posibilidad de cocinar sin desechar aceite usado contribuyen a una cocina más sostenible. Algunas marcas incluso han comenzado a fabricar freidoras con plásticos reciclados y componentes reutilizables, alineándose con las nuevas tendencias ecológicas.

Desventajas y limitaciones que debes considerar

A pesar de sus beneficios, no todas las personas necesitan una freidora de aire. Si ya se cuenta con un horno moderno con funciones de convección, la diferencia práctica puede ser menor. Además, algunos modelos tienen capacidad limitada, lo que no los hace ideales para familias grandes.

El precio también varía mucho según la marca y las funciones. En 2025, los modelos básicos pueden costar entre 250.000 y 400.000 pesos, mientras que los más avanzados superan fácilmente el millón. Por eso, es importante comparar características como la capacidad (en litros), la potencia y la garantía antes de comprar.

Otro punto a considerar es que no todos los alimentos quedan igual de bien. Por ejemplo, las carnes con alto contenido de grasa pueden soltar humo, y algunos rebozados no se doran de forma uniforme si no se les da la vuelta a mitad de la cocción.

Qué tener en cuenta antes de comprar una freidora de aire

Antes de decidir si vale la pena, es recomendable evaluar tres factores clave:

1. Frecuencia de uso

Si cocinas a diario o buscas una opción rápida para comidas caseras, una freidora de aire te resultará útil. Pero si cocinas ocasionalmente, puede ser un gasto innecesario.

2. Tamaño y capacidad

Los modelos pequeños (2 a 3 litros) son ideales para una o dos personas. Los medianos (4 a 6 litros) sirven para familias pequeñas, y los grandes (7 litros o más) son mejores para hogares grandes o quienes cocinan en cantidad.

3. Funciones adicionales

En 2025, muchas freidoras incluyen funciones adicionales como pantallas táctiles, conectividad WiFi, recetas automáticas y control por voz. Estos extras pueden ser útiles, pero también encarecen el producto. Si solo te interesa cocinar rápido y saludable, un modelo básico puede ser suficiente.

Las mejores marcas y modelos recomendados en 2025

Entre las marcas mejor valoradas este año destacan Philips, Ninja, Cosori, Xiaomi y Oster. Todas ofrecen modelos de distintas gamas y precios.
Por ejemplo:

• Cosori Dual Blaze 6.8L: destaca por su doble resistencia, que mejora el dorado y reduce el tiempo de cocción.

• Ninja AirFryer Max XL: ofrece un modo “Max Crisp” que logra un acabado más crujiente.

• Philips Essential Connected: permite controlar la cocción desde una app móvil y descargar recetas automáticas.

En el mercado colombiano y latinoamericano, las opciones de Imusa y Oster siguen siendo las más accesibles y con mejor soporte técnico.

Entonces, ¿vale la pena comprar una freidora de aire en 2025?

Sí, vale la pena si buscas cocinar de forma más saludable, ahorrar energía y tiempo, o simplificar tus comidas sin complicarte con el horno. Pero no es un electrodoméstico imprescindible para todos. Su verdadero valor está en cómo la uses: si se convierte en tu aliada diaria, es una excelente inversión; si la usas poco, será solo un aparato más en la cocina.

En conclusión, las freidoras de aire siguen siendo una opción moderna, práctica y económica para quienes buscan una cocina más limpia, rápida y saludable. En 2025, los avances tecnológicos y la variedad de modelos disponibles hacen que la inversión valga más la pena que nunca.